"Duelos y quebrantos" es el nombre del plato que comía los sábados el ingenioso hidalgo D. Quijote de la Mancha según se menciona en el inmortal libro de D. Miguel de Cervantes. En esencia es un revuelto de huevos con panceta, jamón, chorizo, hígado y sesos. Para las croquetas lo hemos simplificado quitando algunos componentes.
INGREDIENTES para 40 croquetas aproximadamente
- 75 g de panceta
- 75 g de jamón ibérico
- 50 g de chorizo
- 2 huevos
- 2 dientes de ajo
- Aceite de oliva
- Nuez moscada
- Harina, leche, huevos para el reboce y pan rallado.
ELABORACION
Hacemos el revuelto
Picar finamente la panceta, jamón y chorizo. Picar los dientes de ajo y dorarlos en una sartén con poco aceite. Incorporar el tocino y cuando esté dorado agregar el jamón y el chorizo y seguir rehogando. Verter los dos huevos, previamente batidos, y revolver a fuego lento hasta que estén cuajados.
Hacemos la bechamel
En recipiente aparte mezclar 6 cucharadas de harina y 0,5 litros de leche.
Añadir un chorreón de aceite al revuelto (hay quien prefieres mantequilla) revolver y añadir la mezcla de harina y leche y un poco de nuez moscada. Mover la mezcla sin parar hasta para que no se pegue al fondo ni a las paredes, hasta que se forme una masa con bastante consistencia que ya no se pega a la sartén.
Extendemos la masa en un plato llano y esperamos a que se enfríe.
Hacemos las croquetas
Una vez fría comenzamos a elaborar las croquetas pasándolas por harina, huevo batido y pan rallado.
Solo queda freírlas en una sartén con abundante aceite o en freidora.