- Dos patatas grandes,
- 1 cebolla,
- 8 huevos,
- 200 gramos de boletus confitados en aceite (o frescos, introducidos en aceite con un poco de sal y dos dientes de ajo a fuego muy bajo, durante 50 minutos),
- Aceite para freír,
- Un trozo de foie de pato u oca de unos 50 gramos,
- Sal y pimienta.
Troceamos las patatas como para tortilla y las freímos en aceite de oliva hasta que queden tiernas pero no doradas. En una cazuela ponemos la cebolla cortada en juliana sobre dos cucharadas de aceite, a fuego medio hasta que estén transparentes, poner el fuego al mínimo y añadir los huevos batidos y los boletos. Mover con una cuchara de madera hasta que quede cremoso pero nunca que cuaje (si es necesario apartar del fuego y poner de nuevo si comienza a cuajar). Cuando apartemos del fuego, añadimos el foie troceado y removemos un poco.