Veladas catedralícias
-De Febrerillo el loco, la referencia nos sitúa en el martes 6 como comienzo de nuestras veladas gastronómicas del 2018 (recuerden que el primer martes de Enero no es lectivo gastronómicamente hablando por fechas navideñas) y ya verán la justificación de la locura del mes, qué no fue moco de pavo, ni ná… Con las ausencias de don Mario, Carlos y ManuéFT, el doblete de Cocina estaba constituido por Julio y Lambiris, lo cual, a priori garantizaba el evento gastronómico, pero… surgió la anécdota entre curiosa e increíble, pero ¿Qué pasó? Pues nada más ni menos, que al llegar los primeros comensales a la plaza de la Catedral, nos topamos con el Terraza cerrado, a cal y canto. Ne c’est pas posible…Oh,la,lá.
-¿Cerrado? Pues SÍ, pero…¿y qué hacemos ahora?? Se impuso la amistad sobre una teórica lógica, que pasaría por el cambio de restaurante. De este modo, y tras asumir el glorioso fallo técnico, llamamos a Pelayo y sin ninguna circunstancia el “inexistente protocolo de actuación” se puso en marcha, logrando culminar la velada de forma brillante y reposada, quedando la historieta en un curioso capitulo anecdotario para el recuerdo. Y es que en este Grupo se aprovecha casi todo, lo cual justificaba las miradas de reojo a la Tele, en busca de un disimulado maridaje con alguna referencia en el COAC. (Concurso Oficial Agrupaciones Carnavalescas-2018), que se celebra en el Gran Teatro Falla de Cádiz.
-Una vez situados y superada la singular anécdota (comentada en nuestro Anecdotario-GGG-Hist.119), entramos en faena felicitando de largo a los chefs del evento con sus marmitones puntuales. Menú de diseño, en época carnavalesca por su variedad y colorido, originalidad o cambios curiosos como expresión de la cultura culinaria de ambos cocineros. Más clásico, incluso rústico, el amigo Lambiris con un Julito vanguardista que progresa adecuadamente en cocina, incluso de diseño, lo cual contrasta con sus escasos conocimientos culinarios al ingreso en el Grupo (1989). Ahora es el cocinero oficial en su casa, a pleno rendimiento.
-Recordando su época de corista, e incluso, como miembro del Jurado del Falla en 2008, ahora apacigua su hambre carnavalesca formando parte de un Coro ilegal o sólo callejero(así llamado porque no participa en el Falla. Disfrazado de egipcios, este coro es dirigido por el amigo Luis Frade, que precisamente fue invitado por Julio, a nuestro popurrit gastronómico, donde destacó tanto como encima de la batea, superando la incertidumbre inicial del Terraza cerrado. Cumplió con magnifica nota el envite culinario del corista-chef y alabó el buen ratito de nuestra Velada, mostrando su buen saque en el Falla, perdón, digo el Terraza.
-Tras esta espesa introducción, contaremos nuestra primera Velada del año 2018 con el concurso del Falla, cual fiel centinela de nuestros devaneos culinarios, que se iniciaron con una cata de “embutidos de matanza extremeña” como detalle del amigo Casto, que volvió a triunfar plenamente con la degustación de chacinas caseras, tipo jamón, salchichón y chorizo, auténticos. En el apartado de ENTRADAS, simplemente añadirle la titulación “…DE PUTA MARE”, comenzando con un original y sorprendente “Carpaccio de langostinos y salicornia ”(ver receta)fresco, marinero y sabroso con impactante presentación, que restó algo de protagonismo a la exquisitez de las “Canastillas de crema de queso azul de Cádiz y membrillo casero” y “Yogurt de foie con anguila ahumada y membrillo casero” (ver receta),que gustaron mucho proporcionando un profundo paladar que supo a poco. En mesa se distribuyeron unas suculentas “Banderillas con anchoas caseras” (ver receta), que el amigo Julio elabora artesanalmente en su casa, consiguiendo un buen nivel de aceptación.
-A todo esto, mantuvimos nuestro Tinto gaditano, Garum (Bodegas L. Pérez), tras las clásicas cervezas y/o manzanilla o palo cortado, en el comienzo de la velada. En tanto, hace un rato en el que Lambiris cocina unas espléndidas y curradas “Cocochas con fideos y lechuga de mar”(ver receta), en una especie de fideuá con fideos finos con un punto de textura adecuado, intenso sabor marinero y fondillo cremoso con el punto del alga, que gustó mucho al personal. Llegamos al final del popurrit, que tatareamos todos con ecos de carnaval, pendiente solo del dulce contraste entre el “higo relleno de nata”con magistral toque del incombustible Cacao Pico y nueces, y un clásico “Bizcocho clásico de Turrón” (ver receta), haciendo especialmente hincapié en la nula relación con el poeta de chirigota sevillana, conocido como el Bizcocho…
¡Buen Provecho!
J.M. Pérez Moreno - GGG-XXXI